No le hagas a nadie lo que no querés, hay que ser bueno pero no hay que se boludo, desconfiá de todo lo que vos creés para ver las cosas por primera vez, y que el silencio nos deje de una vez mudos. Que no te importe, sigue tu camino.
El amor le preguntó al odio: -¿Por qué odias tanto?
El odio le contestó: -Porque un día amé demasiado.